miércoles, 4 de enero de 2017

Ocurrencias...

Es usual escuchar frases recurrentes cuando se acerca el fin de año: ¨Que se vaya rápido éste año y venga el próximo para que todo cambie, el otro año será diferente, esperemos a que el año nuevo nos traiga cosas buenas¨. Tendríamos que perder la esperanza, si el 2 de enero (aún el 1 de enero andamos embelesados con el ansiado cambio) nos levantamos con los afanes que trae la vida, trabajar, cocinar, estudiar, lavar, cuidar los niños, etc. etc.?.  Si somos menos sentimentales, caeríamos en cuenta que todos los días termina un año, pero es necesario tener un punto de partida y un punto donde finalizar; cuando hemos tenido ciertas situaciones desfavorables o negativas nos animamos pensando que hay esperanzas cuando llegue el nuevo año para que todo mejore. Hay una transición de unos números que nos indican que los años avanzan, el tiempo no se detiene y nosotros debemos avanzar al mismo ritmo del tic-tac del reloj. Se debe tener en cuenta que las circunstancias cambian, si nosotros cambiamos, que hay que ser optimistas, arriesgados, valientes y sobretodo tener la firme convicción que el futuro depende del presente.

Es ese el motivo del nacimiento de Ocurrencias, un espacio con el que quiero compartir relatos, historias y costumbres de personajes anónimos o conocidos, de pueblos pintorescos con tradiciones arraigadas, de sentimientos y de amores. Es el desarrollo de una parte de mi profesión, la redacción, periodismo fresco y ameno con el que espero cautivarlos en éste nuevo año, por eso también yo sueño con esos cambios y doy la  bienvenida al 2017.

4 comentarios:

  1. Felicidades, éxitos y bendiciones, esperemos ver más ocurrencias muy seguidas

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  2. Carlos, gracias por sus buenos deseos.Es un compromiso!!!!

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  3. Congratulaciones Isabel te deseo que sigas avante en tus proyectos. 💙💙💙💙💙🎉🎈🎉🎼🍹

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